Hoy disfrute de un tarde soleada dejando pasar las horas mientras perdía mi
mirada ante el cielo azulado tumbado en el césped rodeado de margaritas
blancas. Sujetando las manos de mi
inocencia impacientes por coger una simple margarita y como aquel que tira
una moneda al aire, cambie la cara y la cruz por un “¿Lo llamo? o… ¿Espero que
me llame?
Mi duda quiso apostar y dar paso al azar ignorando el numero de pétalos, empecé a
desnudar la flor al mismo tiempo que revivía en mi interior los dulces
momentos que he compartido con él hasta
el día de hoy: un paseo, un cine, una caricia, su voz, su ternura…, todo él.
Pero me detuve y si no recuerdo mal, el cuarto pétalo todavía seguía
deslizándose por el aire cuando me cuestione si el hecho de coger el teléfono, marcar su
número y escuchar su voz, ¿Estuviera incumpliendo un protocolo de relaciones
entre dos personas? ¿A caso mover ficha primero significa desenfreno pasional?
O para otros ¿Puede significar la pérdida del orgullo por ir detrás de una
persona que te atrae por múltiples razones que te hacen sentir mariposas en el
estomago?
Evitemos los
tópicos sin sentido común, como por ejemplo el “Me tengo que hacer de rogar para que me valore y este más tiempo
por mi” ¿Perdona? ¿Por qué no valoras tú el tiempo que esa persona está invirtiendo
solo por tenerte en su vida? Eso lo
ignoramos, no somos conscientes del esfuerzo que está realizando esa persona
por cederte vía libre a sus sentimientos; mientras tú creas una barrera de
acceso que solo desaparecerá si la persona
que te causa nervios al verlo cede primero. Recompénsalo, envíale un mensaje al móvil de
tal manera que piense en ti mientras que en su interior estalla una fusión de emociones,
a la vez que nace una sonrisa inocente.
A simple vista
parece un gesto insignificante pero todos poseemos el don de poder hacer
sentir importante a una persona, darle el gozo de la satisfacción de que le
importas, apartando los temores y obstáculos; porque con el tiempo le estas
ofreciendo la oportunidad de ser tu compañero.
El deseo de
compartir con otra persona nace por sí solo. No conoce ni el tiempo ni el
espacio por lo tanto no se puede comprar ni alquilar, ni buscarlo ya que se
encuentra. Se trata de una esfera que gira sobre sí misma alimentándose de
todas las experiencias que aportéis sin intenciones egoístas, ni
manipulaciones para conseguir su atención.
Las puertas como
las oportunidades no se abren por si solas, necesitan una llave que guardas en
tu interior y no existe otra igual. No permitas que se llene de telarañas por
cobarde, orgullo o por una decepción de tu pasado. Cuando estés frente a un
posible inicio no dudes si la recompensa es positiva.
Introdúcela, gírala suavemente y disfruta de los
nuevos acontecimientos que te mereces por ser tú mismo cada día.
David Boix
David Boix
Tienes muchísima razón. Si nos abriéramos un poco a los demás y aprovecháramos las oportunidades, al menos tendríamos acceso a tener otras experiencias. Quizás incluso la de nuestra vida. Simplemente el hecho de mantener las máscaras por miedo, por protocolos o estrategias te hace sentir triste, es triste, si en el fondo queremos dar un paso hacia delante. Si eres tú mismo, perderás, arriesgarás, pero también ganarás. Y eso no tiene precio.
ResponderEliminarMe quedo con "¿Perdona? Por qué no valoras tú el tiempo que está invirtiendo solo por tenerte en su vida?"
Felicidades por la entrada. Me ha encantado!!!